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Sillas salvaescaleras de ocasión

Salvaescaleras de ocasión

En realidad las sillas salvaescaleras de ocasión deberían llamarse sillas salvaescaleras reacondicionadas, este sería su verdadero término. La razón es simple, estas sillas no se venden de particular a particular, esto sería imposible puesto que cada escalera es distinta y es imposible su instalación en otro lugar distinto a la vivienda para la que fueron diseñadas. Las llamamos de ocasión porque en el mercado nacional no hay costumbre de utilizar el término “reacondicionadas”

Es importante conocer la procedencia de las sillas. Nuestras sillas salvaescaleras de ocasión son importadas desde Reino Unido, la razón es muy simple, este país es líder mundial en la instalación de productos de accesibilidad y por tanto es mucho más sencillo conseguir sillas que ya no tienen uso para reacondicionarlas y ponerlas de nuevo en circulación.

Nuestra empresa es la distribuidora para España de la reconocida fabrica Británica Bespoke. Bespoke está especializada en comprar sillas usadas y reacondicionarlas para eliminar barreras arquitectónicas en otros hogares.


Proceso reacondicionamiento

Cada silla retirada de una vivienda es llevada a la fábrica para realizarle una exhaustiva revisión.

Las sillas salvaescaleras se componen de la unidad motor/electrónica y de las guías por las que circulan.

Unidad motor/electrónica/asiento

Esta parte de la silla es sin duda la mas importante. En fabrica se desmonta por completo y se revisa minuciosamente. Se sustituyen todos los componentes susceptibles a desgaste y cualquier otro componente que no se encuentre en estado original. Una vez realizada esta tarea, se vuelve a montar y queda lista para su reutilización.

Guías

Las guías de las sillas se dividen en piezas de menor tamaño, se catalogan y se almacenan para su posterior uso.


Fabricación de la silla salvaescaleras de ocasión.

Los distribuidores de cada país envían a fábrica los planos de la escalera donde se debe instalar la silla. Estos planos los confeccionamos de forma minuciosa, una correcta medición de una escalera puede costar hasta 3 horas de un experto in situ además del tiempo que dedican los ingenieros a confeccionar el plano.

En la fábrica se reconstruye la escalera a tamaño real. Lo hacen utilizando moldes de escalones y rellanos. Se necesitan cientos de moldes para poder recrear una escalera a imagen y semejanza de la del cliente.

Una vez creada la escalera se instala la guía que previamente se había almacenado codificada y se instala la silla completa para probar su funcionamiento.

Posteriormente los trozos de guías que componen la escalera se lijan, se les da una imprimación y se pintan de nuevo. De esta manera nos aseguramos que la guía está totalmente tratada, sin desperfectos y pintada uniformemente.

Una vez realizado todo el trabajo descrito solo queda embalar la silla y enviarla a su destino.

Este largo y cuidadoso proceso asegura que una silla reacondicionada sea tan segura como una silla de nueva fabricación.